Carlos E. Miragaya Pitera nació en Madrid en 1978 y reside en Seseña (Toledo) desde 2010. Amante de la fotografía, la pintura y el cine, vive implicado en el desarrollo de las artes escénicas y plásticas gracias a su continua formación.
En este fragmento nos explica en qué ha consistido su proyecto 100x100 Seseña:
[...] Entonces quise probar retratos con un estilo en blanco y negro. Y qué mejores modelos que vecinos y vecinas que estaban con la misma incertidumbre que yo, con los mismos miedos, retratarles cuando se pudo y así acercarnos, estableciendo de esa manera un vínculo a través de la fotografía. 100 personas que se convirtieron en 100 historias. Permitidme transcribir las palabras de LLorenç Raich Muñoz, profesor del Institut d'Estudis Fotogràfics de Catalunya, que muy amablemente me dedicó en una de las conversaciones que mantuvimos sobre el Proyecto #100x100Sesena: "Esos 100 retratos son el reflejo de un colectivo que se sincera consigo mismo y con el mundo a través de tu cámara; y tú, además, te sinceras con la humanidad al mostrar al ser desde una sugerente e intuida desnudez porque desnudas se han de expresar esas 100 miradas". En todo este recorrido de años en el arte, puedo afirmar que tengo una mirada expresionista en muchos aspectos de mi vida, carácter expresionista que lo impregna todo. Después de viajar por gran parte del territorio español pintando paisajes al natural, viviendo por y para el entorno, decidí probar con otros temas de interés para mí como son la escultura o la fotografía. Esta incursión se debió quizás por la necesidad de trabajar la técnica mixta, por lo que para mí, pintura, escultura y fotografía son totalmente complementarias, diversas caras de un prisma. A nivel formativo, además de acudir durante siete años como alumno al Centro de Arte "Julián Guerrero", me he documentado y consultado extensa y variada bibliografía que además he ido atesorando en mi biblioteca particular. Durante todos estos años, también he realizado cursos, talleres de fotografía y asistido a ponencias, exposiciones y actividades culturales. He comprobado que la mirada de un pintor y un fotógrafo comparten muchas características y tras esta reflexión, me ha surgido la idea de llevar a cabo un proyecto fotográfico. Me fascina capturar el momento de las personas. "Momentos" como visión conceptual, como retrato. Y es ahora cuando siento que, como fotógrafo, necesito evolucionar para encontrar cuál es el motor que todo lo mueve. Justamente, en esta disertación, presento este proyecto cuyo objetivo es, precisamente, dar visibilidad a lo que nos hace ser seres sociales y sobre todo, reflotar mediante la fotografía aquellos momentos que se repiten una y otra vez, casi simultáneamente en muchos de los rincones del mundo.