Carta a Cayetana


Casado y el PP -la disciplina de voto- han sacrificado la autonomía de su formación. Apunta Cayetana la destrucción de los puentes afectivos entre el Partido Popular y los votantes de VOX.

Querida Cayetana:

Peor que eso, Cayetana -y ya que apuntas con arte prestidigitador la voladura de VOX como consecuencia del discurso rupturista de Casado-, es la orfandad real en que dejáis a vuestros votantes. Permite que te lo diga valiéndome de la libertad de expresión: la lógica de votar en contra de tu conciencia no se sostiene. En un primer momento casi mordemos el anzuelo - último anzuelo- de tu conciencia; pero en tu último juego floral (o de tu recentísima catilinaria) descubrimos tu mala conciencia: y que sufres.
Tenéis que ser conscientes de que a partir de ahora no podéis negar nada a Sánchez. Porque, de hacerlo, perderíais la prebenda. La decisión adoptada por vuestro partido no es un préstamo al gobierno del que podáis esperar intereses. No. Es otra cosa. Es un contrato. Que os obligará día a día a practicar el seguidismo que a los poulares os es consustancial. La única diferencia es que la ilusión del escapismo, de que sois otra cosa, de que podéis ser oposición en cualquier momento en que despertéis de la modorra servil, ha terminado. Con la moción Casado y vuestro PP, habéis convertido vuestra formación en subalterna de Sánchez a tiempo completo. Para ganarse a cada momento y sin excepciones el pan de Sánchez. Y... ¡Ah! Descubriréis que son migajas, mendrugos, comida de gaviotas.

Creo, Cayetana, que deberías haberte rebelado. Piensa. En el momento que Casado falle a su contrato, será represaliado por Sánchez. Lejos de mostrar la unidad del PP, Cayetana, has puesto de manifiesto la debilidad de tu partido. Si te hubieras rebelado habrías mostrado que otro PP todavía era posible. Ya no lo es. Hoy podrás beber y lamentar.

¿Qué te ha parecido?

Artículo anterior Artículo siguiente


__________


¿Te gustan los contenidos de LETRA LIBRE? Forma parte y aporta lo que quieras.


¡GRACIAS!