Semana Santa (La Pascua): tradición y belleza


La belleza se dispara en los campos con la entrada incipiente de la primavera, del mismo modo que se renueva el ciclo vital de la tierra; sucede de igual forma con la tradicional Semana Santa, donde: Veo al penitente, / portando su cruz... / cantando saetas / en la madrugá, porque quiere irse / "al cielo con Ella." Ésta se celebra en la última semana de La Cuaresma, que va desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección. Por esas fechas, cada año la iglesia católica, conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesús, en un período de intensa actividad litúrgica que termina con La Pascua.

Por estas fechas, las distintas cofradías tendrán preparados los retablos que lucirán impolutos por las calles en primavera, pues muchas de las representaciones religiosas son magníficas obras de arte; la imaginería cobra gran protagonismo con el desfile: parece elevarse el lirismo de las imágenes religiosas, hasta afianzar la tradición y embellecer el ambiente (en el caso particular de Badajoz, en dos años, la Semana Santa Pacense, será declarada de Interés Turístico Internacional); y es que todo parece aunarse para exaltar el bendito patrimonio; no obstante, nos centraremos en La Pascua y sus distintas celebraciones, tales como: La cristiana, la Judía, la ortodoxa...

Como ya hemos adelantado, La Pascua Cristiana corresponde al final de la Semana Santa; en ella se celebra la Resurrección de Jesús. Comenzó a celebrase en el año 1513 antes de Cristo, recordando la liberación del pueblo hebreo o Pascua de Dios (1); no debemos confundirla con La Pascua Judía, pues, en principio, era una fiesta de pastores; actuadamente se ha modificado y, al igual que la cristiana, también celebra la liberación de la esclavitud del pueblo hebreo.

En cuanto a la celebración de La Pascua en Inglaterra, esta, se había iniciado antes de que el cristianismo llegase a la región mencionada, donde es conocida como “Pascua -Easter Week-“, especie de fiesta de la primavera o Pascua Florida (2). Recalquemos: La festividad anglosajona nada tiene que ver con la religión cristiana, pues se representa con huevos de Pascua: los se pintan, se decoran y se regalan. El origen de dicha costumbre bien pudiera ubicarse en la prehistoria, dado que ha sido un símbolo que ha venido utilizado gran parte de la humanidad.

Otro ejemplo que tenemos es La Pascua en Finlandia; allí se celebra al estilo de Inglaterra, además de poseer otra curiosa tradición: la de las hogueras: El Sábado Santo se hacen al aire libre, para protegerse de las brujas; concretamente en “la noche que media entre la muerte y la resurrección de Jesús” pues creen que los espíritus malignos campean libremente por el mundo de los vivos.

No olvidemos La Pascua ortodoxa, la que se viene celebrando en la isla griega de Corfú. Sobre las 11:00 horas del Sábado Santo comienza el tañido de las campanas anunciando la Resurrección de Cristo; las ventanas de las casas se abren y, desde ahí, sus habitantes, empiezan a tirar vasijas contra el suelo de las calles. El estruendo se mezcla con las animadas marchas de las bandas de músicas. En cuanto a los orígenes de esta tradición tampoco están claros: existen versiones muy antiguas.

La reducida comunidad de sorbios –minoría alemana–, celebra en la región alemana de Lusacia el Domingo de Pascua, después de la santa misa: El grupo de jinetes lleva la noticia de la Resurrección de Cristo a cada pueblo y ciudad de dicha región; montan caballos engalanados y visten atuendos negros y sobreros de copa, para hacer un espectacular desfile procesional por las principales calles. La procesión acaba de nuevo en la iglesia con otras tres vueltas alrededor de ella.

Podíamos estar enumerando tradiciones muy interesantes, de orígenes remotos, sin olvidar la de los florentinos, que, además, posee atractivo turístico importante; aunque, yo no me iría tan lejos: en Navalvillar de Pela (mi pueblo natal), se celebra una romería bien divertida el Lunes de Pascua, llamada “Las Pascuas”.

Se lleva a cabo en La Dehesa de Moheda Alta, término municipal de Navalvillar de Pela. Este día de campo es muy señalado para mis paisanos: lo viven con especial entusiasmo. Los peleños tienen por costumbre de enjaezar el caballo –poseen animales de labor– y se van montados para “Las pascuas”, siempre que haga buen tiempo: El jinete, ataviado, / va liviano de equipaje, /con la bota, y sin comida.

Los vehículos, en cambio, llevan todo el equipo: La nevera para las bebidas, las fiambreras repletas de tortillas, huevos rellenos, empañadillas; portan la parrilla para asar; se hace “la mamárria”, tuestan la carne, sacan los embutidos de la matanza; para terminar los dulces típicos: manga gitana, rosa de menudillo, bollos, etc., y se acompañan con el café; luego vienen las copas. El camping es completo: mesas, sillas, incluido un toldo, para prevenir algún imprevisto meteorológico. El personal va y viene alrededor de una verbena amerizada; al lado están las barras para servir las bebidas; muy cerca ponen los puestos de quincalla y cacharros para el esparcimiento de los chiquillos... Este lugar, con el paso de los años, se ha convertido en una feria campestre:

En Navalvillar... “Las pascuas", / tradición: su romería; / de todo tiene la viña, hasta las rosas espinas.

La vida en el hombre es como una Semana Santa Divina:

EL ENIGMA DE SU BELLEZA: ROSAS SALVAJES

Y son las rosas, salvajes, de una pasión desmedida,
donde Dios versó la vida.

En tan hermoso paisaje,
Semana Santa Divina, la colmó de hiel e inquina,
con ese bello mensaje:

"Así es la vida, equipaje: van las rosas con espinas".

Pasión, muerte, resurrección: bellas rosas con espinas,
la Pascua su celebración.
Primavera o Pascua Florida.

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(1) Pascua de Dios es religiosa.
(2) Pascua Florida o Easter, fiesta de primavera.

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