Por la alumna María Muñoz Loza, 3º de ESO
Soy un libro. Un libro escondido por una portada falsa, diferente. Esa portada es frágil y se rompe con un leve roce, con cabellos de oro, ojos verdes como el mar, como reflejos de alto cielo, tímida sonrisa,... Los soñadores que están dispuestos a leerme se llevan una gran sorpresa cuando descubren las páginas de mi gran fantasía. Dentro de mí hay historias divertidas, sentimentales, románticas, emocionantes, sorprendentes, misteriosas, aventureras,...
Un libro con un final que está esperando a ser escrito, encantado, un libro al que le gustaría tocar el cielo con los dedos.
Soy un día soleado, un día lleno de noche. Cada día mis rayos dorados iluminan un nuevo mundo, y cuando la luna pasa al Oeste la sombra de mis floes se estira al Este. Mis noches son misteriosas con mil ojos que siempre te acompañan. Y cuando amanezco veo cómo una luz fresca chorrea de oro al campo y lo acompaña para siempre.
La gente piensa que soy una chica tímida que se compone del deseo y del temor de no conseguirlo, pero no saben que para ellos sólo hay una flor sin abrir mientras la noche se apodera de ella. No saben que puedo crear una tempestad enorme en los océanos del mundo ni que puedo hacer que los pájaros canten esos cánticos tan maravillosos. La chica de granadas con rubor de soles con un cordial amigo siempre está dispuesta a ofrecerles una lluvia de estrellas que les haga feliz.
Ésa soy yo.