El Clavileño
Cubriéronse, y sintiendo don Quijote que estaba como había de estar, tentó la clavija, y apenas hubo puesto los dedos en ella cuando todas las dueñas y cuantos estaban presentes levantaron las voces, diciendo:
—¡Dios te guíe, valeroso caballero!
—¡Dios sea contigo, escudero intrépido!
—¡Tente, valeroso Sancho, que te bamboleas! ¡Mira no cayas, que será peor tu caída que la del atrevido mozo que quiso regir el carro del Sol, su padre!
Oyó Sancho las voces, y apretándose con su amo y ciñiéndole con los brazos, le dijo:
—Señor, ¿cómo dicen estos que vamos tan altos, si alcanzan acá sus voces, y no parecen sino que están aquí hablando junto a nosotros?
—No repares en eso, Sancho, que como estas cosas y estas volaterías van fuera de los cursos ordinarios, de mil leguas verás y oirás lo que quisieres. Y no me aprietes tanto, que me derribas; y en verdad que no sé de qué te turbas ni te espantas, que osaré jurar que en todos los días de mi vida he subido en cabalgadura de paso más llano: no parece sino que no nos movemos de un lugar. Destierra, amigo, el miedo; que, en efecto, la cosa va como ha de ir y el viento llevamos en popa.
—Así es la verdad —respondió Sancho—; que por este lado me da un viento tan recio, que parece que con mil fuelles me están soplando.
Y así era ello, que unos grandes fuelles le estaban haciendo aire: tan bien trazada estaba la tal aventura por el duque y la duquesa y su mayordomo, que no le faltó requisito que la dejase de hacer perfecta.
Sintiéndose, pues, soplar don Quijote, dijo:
—Sin duda alguna, Sancho, que ya debemos de llegar a la segunda región del aire, adonde se engendra el granizo y las nieves; los truenos, los relámpagos y los rayos se engendran en la tercera región; y si es que desta manera vamos subiendo, presto daremos en la región del fuego y no sé yo cómo templar esta clavija para que no subamos donde nos abrasemos.
En esto, con unas estopas ligeras de encenderse y apagarse, desde lejos, pendientes de una caña, les calentaban los rostros. Sancho, que sintió el calor, dijo:
—Que me maten si no estamos ya en el lugar del fuego o bien cerca, porque una gran parte de mi barba se me ha chamuscado, y estoy, señor, por descubrirme y ver en qué parte estamos.
—No hagas tal —respondió don Quijote— y acuérdate del verdadero cuento del licenciado Torralba, a quien llevaron los diablos en volandas por el aire caballero en una caña, cerrados los ojos, y en doce horas llegó a Roma, y por la mañana ya estaba de vuelta en Madrid, donde dio cuenta de todo lo que había visto; el cual asimismo dijo que cuando iba por el aire le mandó el diablo que abriese los ojos, y los abrió y se vio tan cerca, a su parecer, del cuerno de la luna, que la pudiera asir con la mano, y que no osó mirar a la tierra, por no desvanecerse. Así que, Sancho, no hay para qué descubrirnos, que el que nos lleva a cargo, él dará cuenta de nosotros [...]
—No sé lo que es —respondió Sancho Panza—; solo sé decir que si la señora Magallanes, o Magalona, se contentó destas ancas, que no debía de ser muy tierna de carnes.
Todas estas pláticas de los dos valientes oían el duque y la duquesa y los del jardín, de que recibían extraordinario contento; y queriendo dar remate a la extraña y bien fabricada aventura, por la cola de Clavileño le pegaron fuego con unas estopas, y al punto, por estar el caballo lleno de cohetes tronadores, voló por los aires con extraño ruido y dio con don Quijote y con Sancho Panza en el suelo medio chamuscados.
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1. LOCALIZACIÓN:
1.1. El autor.
Miguel de Cervantes Saavedra, el escritor español más universal, nació en Alcalá de Henares en 1547. Se unió a ejercito con veintidós años y participo en la batalla de Lepanto (1571), donde fue herido de la mano izquierda.
De regreso a España, fue apresado por los turcos y vivió cinco años cautivo en Argel. Volvió a Madrid donde intento dedicarse a la literatura, aunque no obtuvo mucho éxito inicial.
Acepto el cargo de comisario real de abastos de la Armada Invencible. Acusado de mala administración de los fondos recaudados, fue encarcelado.
En 1605 publico la primera parte del Quijote y empezó a alcanzar fama como escritor.
1.2. La obra.
Cervantes se dedico a escribir distintos géneros literarios, entre ellos la poesía. Durante su trayectoria con la poesía, podemos destacar dos etapas:
• Primera etapa: escribió obras que seguían los preceptos de la normativa clásica, de los cuales solo se conserva: Numancia y Los tratos de Argel.
• Segunda etapa: debido al fracaso de su teatro anterior, Cervantes cedió a la formula dramática triunfante de Lope de Vega y escribió Ocho comedias y ocho entremeses, nunca representados (1615).
1.3. Cronología.
Miguel de Cervantes se encuentra, cronológicamente, en el ambiente de finales del renacimiento. En este periodo se produce el auge de la narrativa de ficción, destinada al entretenimiento. Las novelas de caballería son típicas de esta época.
Como ya sabemos, el Quijote es una novela de caballería pero lo que le hace especial es que Cervantes hizo una critica en tono humorístico de esta obra.
Las novelas de caballería narran las aventuras de un caballero andante que recorre el mundo enfrentándose a seres fantásticos en defensa de la justicia y la lealtad, para demostrar el amor a su dama.
2. ANÁLISIS DEL CONTENIDO:
2.1. Argumento.
El autor nos narra, en uno de los episodios de Don Quijote de la Mancha, el viaje de sus dos protagonistas a lomos de un caballo de madera capaz de viajar por los aires para luchar contra el gigante Malambruno. Esto es lo que creen el caballero y su escudero, engañados por unos duques y su mayordomo, se suben al caballo de madera con los ojos vendado. Los duques los han acogido en su palacio de campo para entretenerse a su costa y poderse reír de ellos dos junto con más espectadores en su jardín. Al final terminan poniendo cohetes al caballo de madera para que salieran volando y terminar con la extraña aventura.
2.2. Tema.
El tema del fragmento puede ser la ingenuidad de los caballeros andantes.
2.3. Estructura del contenido.
Al ser un texto en prosa, el contendido no se puede dividir por lo que estaríamos hablando siempre del mismo contenido.
2.4. Personajes, tiempo, ambientación y punto de vista del narrador.
Los personajes que podemos apreciar en el fragmento, son:
• Principales: don Quijote y Sancho aparecen como personajes principales ya que su aventura es el tema principal en el que se basa el autor.
Don Quijote es un hidalgo apasionado a la lectura. Enloquece y cree que es un caballero andante, también se inventa una dama de la cual se enamora: Dulcinea del Toboso.
Mientras, Sancho es el escudero de don Quijote durante sus viajes. Es su tierra es un labrador manchego, realista e interesado, rustico e ignorante, pero dotado de ingenio natural.
• Secundarios: el duque, la duquesa, el mayordomo y los espectadores del suceso que se encontraban en el jardín, son los personajes secundarios ya que ellos solo se encuentran viendo lo que dicen el caballero y su escudero.
El tiempo interno como el externo coinciden en la obra. Se trata de principios del S. XVII en el que existían los caballeros andantes.
Con respecto a la ambientación, el texto se desarrolla en la finca de los duques, concretamente en su jardín. Es allí donde han instalado un caballo de madera para subir a don Quijote y Sancho. Sobre la ambientación anímica, ellos se encuentran en tensión porque no saben que hacer ni donde están, ya que van con los ojos vendados. Mientras tanto, los duques están en un momento de alegría al ver como los caballeros no saben que hacer.
3. ANALISIS DE LA EXPRESIÓN.
3.1. El estilo.
El Quijote es considerado la primera novela moderna por los personajes, por la historia que narra y por los recursos técnicos que utiliza el autor.
El lenguaje del texto es natural y el que se empleaba en la época en la que fue escrito.
El tono de la historia es humorístico, ya que el autor hace una crítica con humor de los caballeros andantes.
La cosmovisión del autor es realista porque presenta lo que se ve si intención de reformarlo.
3.2. Análisis de la forma.
Al ser un texto en prosa no se encuentra ninguna figura retórica basada en sonidos.
Respecto al plano morfosintáctico, tampoco se ha encontrado nada.
En esta obra no hay ninguna figura retórica como símil, personificación, etc.
Cervantes utiliza distintos recursos muy novedosos para su tiempo:
- Cervantes finge ser un copista.
- Utiliza los diálogos como medios para conocer la verdadera personalidad de los protagonistas.
- El humor resultante del choque entre las personalidades de los protagonistas crea disparatadas aventuras.
4. CONCLUSIÓN.
La actitud humorística del autor durante todo el texto, hace que sea muy entretenido de leer. El texto no tiene semejanza con ningún otro que fuese escrito en su época y por eso lo califican como el más avanzado a su tiempo.
En el texto se puede ver la conveniencia que había entre personas, por ejemplo porque los duques habían dejado hospedarse en su casa a los caballeros, pero a cambio iban a hacerles sufrir para su disfrute propio.